El fragmentar los países no es algo nuevo. En los años 30 del siglo pasado un señor bajito con un ridículo bigote nacido en Austria ya tenía el proyecto de fragmentar Europa para su dominio, proyecto este que contaba con el visto bueno de la élite económica alemana.
La "Gran Alemania" europea se construía recuperando territorios, anexionándose Austria...y fragmentando al resto.
Las potencias, sobre todo las que tienen ambiciones imperialistas, aprovechan los países débiles para imponerles sus condiciones e intervenir en sus asuntos internos.
¿Hoy la antigua Yugoslavia que peso tiene en el tablero mundial?. Ninguno.
Al hilo de esto, la izquierda más consecuente, debe de rechazar la fragmentación de España, ya que flaco favor le haría a la clase trabajadora dejarlos a merced de las potencias más agresivas (EEUU, Rusia...)en sus imposiciones de todo tipo.
Existe una parte de la izquierda en este país, que no se aclara con el problema catalán, parecen estar con la burguesía separatista, más que con la UNIDAD de ESPAÑA. Y no hablo de Rajoy.

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