Hace un año que la organización atraviesa por una mala racha y ante la escasez de recursos, Cáritas Interparroquial de Yecla lanza un llamamiento a la población para aportar alimentos y artículos de higiene con los que atender la creciente demanda con la que lidian desde el pasado año.

Por ello, Cáritas ha lanzado un SOS ante la escasez de recursos y la demanda disparada desde hace un año. Son familias, en su mayoría procedentes de Sudamérica. Al mes entregan una media de 250 bolsas de alimentos valoradas en 20 euros cada una, a lo que hay que sumar recibos de agua, luz, butano y medicinas.

Las necesidades se han disparado ante, según el personal de Cáritas, ante «la llegada de nuevo de inmigrantes y las condiciones precarias de muchos puestos de trabajo». Concretamente las peticiones de ayudas han aumentado un 28% y cada vez se cuentan con menos recursos.Según datos de la organización, actualmente Cáritas Yecla atiende a cerca de 300 familias, entre 800 y mil personas, que han llegado en los últimos años a Yecla y ocupan puestos de trabajos temporales y precarios, «con lo que hay familias que no pueden subsistir», aclaran desde la ONG.

Otra de las posibilidades a las que están abiertos y a las que también invitan a participar es hacerse socio-donante a través de aportaciones económicas, puesto que «aunque necesitan alimentos también hay otras iniciativas y proyectos que se llevan a cabo con dinero, otro bien escaso ahora mismo».

Ante una despensa vacía, los voluntarios de Cáritas, saldrán este próximo 15 de Junio a los supermercados de la ciudad, a solicitar ayuda.
Se necesitan productos básicos de alimentación, de higiene personal y de todo aquello que una familia pueda necesitar.

Desde Cáritas quieren transmitir un mensaje, se necesita más solidaridad con la aportación de lo cada uno pueda ofrecer, y que no quepa duda, que los alimentos que se dan son bien aprovechados.

Una de las personas que tiene la necesidad de acudir puntalmente a Cáritas a recibir ayuda nos cuenta, gracias al apoyo que reciben de la institución, pueden cubrir sus necesidades más básicas.

Cáritas también resalta que hay datos positivos de los que alegrarse, como los del Proyecto Nazaret, con el cual cientos de jóvenes en riesgo de exclusión social han conseguido formación y, un tercio de ellos, un empleo. La iniciativa surgió hace cuatro años y aglutina a jóvenes de Yecla y Jumilla que viven en entornos conflictivos o están en riesgo de quedar excluidos y sin posibilidad de labrarse un futuro laboral.

De 300 personas que han pasado por el programa, 100 han conseguido un puesto de trabajo, un dato positivo si se tiene en cuenta que no es sencillo para las empresas colaborar debido al «perfil no convencional de los chicos que participan, que deben aprender capacidades y comportamientos que no han desarrollado en su entorno».