Finaliza la campaña de la vendimia, en un año atípico para la venta de vinos, con unos resultados muy buenos. Aumenta con respecto al año pasado en un 40% los kilos de uva recogidos, uva que ante la buena climatología tiene una calidad excelente y que han llegado a superar los 13 grados

La primavera de este 2020 fue muy lluviosa, eso sumado a la ausencia de plagas han permitido que este año la producción de uva sea un 40% mayor que en 2019 y con una excelente calidad.

Y es que hacía años que no se cerraba una campaña de la vendimia sin lluvias mientras se recogía el fruto. Las bodegas esperan que esta calidad ayude a vender los vinos de esta añada en un momento muy complicado por la pandemia.

Las bodegas temen una guerra de precios, por ello cuidar a los clientes y consolidar los mercados ya abiertos está siendo la clave para las bodegas y va a marcar la cosecha de 2020. Con el sector HORECA muy golpeado ahora toca consolidar.

Ahora arranca el trabajo duro en bodega: la elaboración de vino. Este año se espera una graduación muy similar a la del año pasado pero con un nivel de maduración diferente que va producir vinos de mucha calidad con el sello Monastrell.

Una vez que ha terminado el ciclo el campo necesita agua y frío, pasos esenciales para preparar la campaña de 2021.