El uso de las mascarillas es obligatorio en espacios públicos para evitar los contagios. Pero esta herramienta está haciendo que surjan diferentes problemas en la piel. El acné, deshidratación, el surgimiento de alergias e incluso la desviación de la nariz.

Es un elemento con el que convivimos a diario y que va a ser compañero de viaje hasta que acabe esta situación de alerta sanitaria. La mascarilla evita el contagio, pero es la responsable del surgimiento de problemas en la piel.

Uno de los principales problemas de la mascarilla es la falta de ventilación que hay en la zona de la boca y la nariz, que es responsable de algunos de los problemas que surgen en la cara por el uso de esta herramienta de protección.

El cambio de mascarilla y el lavado constante de aquellas que son reutilizables son medidas importantes para evitar daños en la piel y en la cara con el uso de esta herramienta de protección que seguirá siendo obligatoria hasta que lo decreten las autoridades sanitarias.