En un campo impracticable que recordaba a los campos de los 80 y 90, el Yeclano Deportivo se llevó el partido de penalti ante un Bala Azul que se sintió discriminado por la labor arbitral. Alcaraz Bernal no vio una pena máxima clara en la primera parte para los locales, y si la vio después para los visitantes en una acción sobre Melgar.

El encuentro no tuvo prácticamente nada más allá de dos equipos que lucharon cada disputa y cada bote de balón con concentración. Los azulgranas supieron ponerse el mono de trabajo y desplegar la versión que obliga este tipo de encuentros. Sin apenas ocasiones, los locales protestaron con razón un penalti sobre Jumilla que no fue concedido. Tras el descanso, el guión se repitió con un Yeclano algo más adelantado, y en la mejor combinación colectiva Alvarito le entregó de tacón la bola a Melgar, quien se durmió en recortes y en cuyo contacto con el central el colegiado entendió penalti. Primer pena máxima de la liga para los azulgranas y primera vez que una labor arbitral parece favorable tras diferentes actuaciones desesperantes..

y es que en el objetivo de volver a la 2ªRFEF hay que sacar determinados partidos por lo civil o por lo criminal, y esta era una de esas ocasiones, donde el equipo se mostró más maduro en robustez para sumar tres puntos allá donde el Cartagena B solo logró empatar.